lunes, 20 de diciembre de 2010

Freedom(2.010) de Jonathan Frantzen(1.959)




He leído este folletín americano por recomendación de "The Economist" que suele acertar en sus recomendacionesLo leo en versión original, lo que siempre es un estrés (570 páginas)

Digo folletín porque creo que es la característica principal de la novela. Cuenta la historia del matrimonio Berglund perteneciente a la clase media americana del norte del país (Minnesota) que se conocen en la Universidad, que se casan, que tienen un hijo y una hija, y que viven en una casa como la de los Simpson. Sus amores y desamores, sus encuentros y desencuentros, sus miedos y sus objetivos. Creo que es una novela que tiene más valor para los que no somos americanos pues nos desvela las características de su cultura, sus motivaciones, sus tabús. Dos fundamentos de la cultura que se percibe entre la historia son el sexo y la libertad individual, y los conflictos que ambos plantean en los personajes; nada nuevo pues casi todas las novelas acaban siendo un cuadro en el que se representa a los seres humanos en su comportamiento biológico-social. El autor lo hace con maestría.

Entre los mimbres de la historia sale el 11S y la invasión de Irak con todas las mentiras y chanchullos de los Cheney, Bush, y compañía. Este aspecto de la novela y la ausencia de aspectos religiosos ha hecho que no haya gustado en algunos círculos conservadores. Uno de los protagonistas centra su vida en la lucha contra la superpoblación del mundo y considera que los humanos somos una especie de cáncer para el planeta, con ello consigue dar una razón de ser a su existencia.



Le pongo *** 1/2 y está a vuestra disposición.

2 comentarios:

Rafa dijo...

Tengo mucho interés de leer a este autor y espero el próximo año empezar con "Las correcciones" y seguir con el que acabas de terminar.
Un abrazo, Rafa

Peter dijo...

Acabo de terminarla. Me sumo a la puntuación de Papá y añadiría que lo que más me ha gustado es esa descripción de la sociedad americana, espejo aunque no nos guste admitirlo en el que nos miramos y esquemas hacia los que nuestra propia sociedad se va acercando peligrosamente. El rasgo que más destaca en todos los personajes es que, perteneciendo a una clase media con toda clase de oportunidades, casi todos encuentran la manera de complicarse la vida a causa del sentimiento de culpa que tienen por tener de todo y de la necesidad de destacar y triunfar en algo, ambos sentimientos muy estadounidenses. La madre, Patty, me ha puesto de los nervios a lo largo de toda la historia, tiene una bofetada tremenda y demasiado tiempo para pensar. Es, en el fondo, víctima de una enfermedad mental indefinida y propia de estas sociedades modernas en las que vivimos.