Con este relato autobiográfico, Carrèrre, autor y guionista de cine francés (1957), ha tratado de soltar sus demonios exhibiéndose tal como él pretende ser: caprichoso, egoísta, absorbente y bastante obsesivo.
El libro pasa de capítulos totalmente tediosos a otros muy amenos, cuando se remonta a hablar de sus antepasados, para a continuación caer en otros puramente pornográficos y vuelta al aburrimiento.
Creo que es muy difícil disfrutar una historia cuyo protagonista quiere que le caigas mal y además que le comprendas y admitas que lo hace como terapia de salvación.
La recomendación del libro me llegó por dos caminos y siento calificarlo con sólo xx1/2.
Está editado por Anagrama y tiene 295 páginas.
Un abrazo
Rafa
1 comentario:
Menos mal que nos recomiendas que no leamos este libro. Lo pongo en la lista de no recomendados.
Diego
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