Dijo Borges, amigo íntimo de Bioy Casares, que esta era una novela perfecta.
Se suele clasificar a esta novela como fantástica pero creo que tiene algo más. El escritor venezolano condenado a cadena perpetua que la protagoniza, y que va escribiendo lo que ve, percibe, y siente, huye a una isla remota en la que pasan cosas inexplicables que le llevan a especular con la vida y la muerte, y con los sueños y pesadillas hechas realidad. En cierto modo kafkiana y en algunos momentos agobiante.
El comienzo de la novela es:
“Hoy en esta isla, ha ocurrido un milagro. El verano se adelantó.”
Escrita con suspense e intriga que consigue transmitir al lector. Hay que tener cuidado al principio para no perderse y prestar atención a lo que nos cuenta el autor.
Me he acordado de Alvaro Cortina (Cultura de el diario El Mundo) leyéndola.
Le pongo ****
1 comentario:
Es un libro del que guardo muy buen recuerdo y al que le puse la misma calificación.
Rafa
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