viernes, 11 de octubre de 2013

El desvío a Santiago (1992) de Cees Nooteboom (1933)


… ¿podría ser también  que cada vez te vas adentrando más, que…tienes la sensación de que vas penetrando más en el alma de un país, y que en este país hay algo que no pudiste encontrar jamás en ningún otro, con todo lo que has viajado? Cuarenta años dura esta historia, es la línea más constante de mi vida junto con la escritura. Y es físico, un año sin el vacío de este país, sin los colores de la tierra y las rocas, es un año perdido.
… Quizá sea lo que más se parece a una historia de amor, con todo lo inexplicable e indescifrable que forma parte de ellas.

Así inicia, este autor holandés, el último capítulo de este libro, que dedica a un viaje a Santiago de Compostela, y que no mantendrá la línea recta y que la palabra camino no significará otra cosa que desvío, el laberinto eterno hecho por el propio viajero que siempre se dejará tentar por un camino lateral, y por el camino lateral de ese camino lateral

Los veinticinco capítulos del libro están fechados, iniciándose el viaje en 1979 y terminando en 1992.

Ese camino lateral es una digresión constante y gozosa sobre cualquier tema que aborda: las iglesias románicas, Homero y la Odisea, los Habsburgo y Velázquez, ETA y Creonte, Castilla, Zurbarán, Asturias y sus reyes, los Taifas, Don Quijote, Pizarro, los Comuneros, Beato de Liébana, el latín y el griego clásicos y muchas más cosas.

Este libro, que adquirí hace veinte años ha vuelto a ser actual porque su autor, casi menorquín de adopción, figuraba en las listas de candidatos al Nobel.

La traducción de Julio Grande es excelente. Le he puesto XXXX1/4 y está a vuestra disposición

Rafa

1 comentario:

Diego dijo...

Qué apetecible.
Quizás lo tenga que pedir prestado...
Un abrazo.
Diego