martes, 11 de agosto de 2015

Hombres sin mujeres (2014) de Haruki Murakami (1949)

Con un guiño a Hemingway, que con el mismo título publicó en 1927 su tercera recopilación de cuentos, Murakami hace su cuarta entrega de narraciones. Antes fueron: El elefante desaparece (1993), no publicado en España; Después del terremoto (2002); Sauce ciego, mujer dormida (2006), y esta, que reúne seis cuentos escritos en 2014, realizados, al parecer, en poco más de tres meses, fruto de intenso trabajo y desbordante inspiración, más uno: Samsa enamorado, escrito y publicado en 2013.     

Drive my car y Yesterday son las dos primeras historias, con resonancias beatlescas: Un veterano actor, con problemas en la vista, se ve obligado tomar a su servicio una choferesa. Mientras le transporta le confía la inexplicable infidelidad de su difunta esposa a quien amaba profundamente e imaginaba ser igualmente correspondido.
En la segunda narración, un joven recuerda el efímero contacto con la bella novia de un amigo, que ha quedado rezagado en el acceso a la universidad y que éste hace posible gracias a una extraña proposición.
La tercera historia, cuyo título es Un órgano independiente, es excelente y nos relata las donjuanescas venturas y el trágico desengaño de un simpático y educado Doctor en cirugía plástica.     
Sherezade es otra extraordinaria historia, cuarta del libro, acerca de una mujer que cuida a un hombre escondido al que alimenta física, erótica e imaginativamente.
Kino, vuelve el Jazz-Bar que formó parte de la vida de Murakami y fue también escenario de otro de sus libros: Al sur de la frontera, al oeste del Sol. Lo que fue placentero y fuente de ilusión, se torna aquí bajo un clima onírico en un lugar tenebroso.
Samsa enamorado, es una original variación de la Metamorfosis de Kafka, que creo no encaja con los restantes relatos.
Cierra el volumen un cuento breve cuyo nombre da título al libro Hombres sin mujeres, de la que he extraído este fragmento:  
Convertirse en un hombre sin mujer es muy sencillo: basta con amar locamente a una mujer y que luego ella se marche a alguna parte. En la mayoría de los casos  (como bien sabrás), son taimados marineros quienes se las llevan. Prácticamente no podemos hacer nada frente a ello.

Murakami tiene swing, todo lo hace sencillo y fluido y una vez más la lectura de sus narraciones supone un grato disfrute (It don’t mean a thing, if it ain’t got that swing) como decía Duke Ellington. Le he puesto XXXX y está a vuestra disposición.

Rafa

4 comentarios:

Marian dijo...

Hola Rafa:
soy fan número uno de Murakami, pero los relatos no me llaman nada de nada. Todavía tengo pendiente de él la segunda parte de 1Q84
Besos

Diego dijo...

Rafa, me lo pido.
¡Deseando bañarme en las historias refrescantes e imaginativas de nuestro querido Haruki!
Gracias y un abrazo.
Diego

Peter dijo...

Con esta crónica de Rafa le entran a uno todavía más ganas de leer a Murakami. A riesgo de Murakamizarme en exceso, me lo apunto para cuando termine lo que estoy leyendo.

Diego dijo...

He conseguido gracias a Peter instalarme el Kindle en mi IPad y comprar este libro en Amazon.es. Gracias Peter. Entro en el selecto club de compradores-lectores compulsivos.

Leo el primer relato, "Drive my Car" y disfruto muchísimo. Una historia llena de creatividad y sencillez. Una lectura reposada que ofrece facetas de los personajes inesperadas.

Seguiré leyendo con tranquilidad, sin prisa, relamiéndome.

Gracias Rafa.
Diego.